La mayoría de los que tenemos caballos hablamos de su valor “terapéutico”. Estar en el establo aseando, alimentando y cuidando a nuestros caballos reduce el estrés, la presión arterial y mejora la salud en general. Sin embargo, es el compañerismo con nuestros compañeros equinos lo que constituye la base de nuestro crecimiento en la relación con estos animales. Estar con nuestros caballos es una “terapia” por así decirlo.
El poder de esta relación no se ha perdido para los profesionales de la medicina. La “equinoterapia” es una herramienta muy popular que se utiliza con una gran variedad de personas. Pero, ¿Qué es la equinoterapia y cómo se utiliza?
Definición de equinoterapia
Según PATH International, la Asociación Profesional de Equitación Terapéutica, hay muchos tipos diferentes de “actividades asistidas por caballos”. En su sentido más amplio, cualquier interacción entre una persona y un caballo es una actividad asistida por caballos.
La terapia asistida por caballos tiene un objetivo más específico. Se trata de un tratamiento que utiliza los caballos para alcanzar objetivos de rehabilitación que están limitados por el ámbito de actuación de un profesional médico. La terapia asistida con caballos no es una actividad dirigida por clubes hípicos locales, grupos religiosos o entrenadores. En su lugar, está supervisada por un profesional médico, normalmente un psicoterapeuta o fisioterapeuta autorizado. La psicoterapia facilitada por caballos, que se utiliza en centros de tratamiento de adicciones, grupos de veteranos y centros de traumatología, siempre está supervisada por un profesional de la salud mental autorizado.
Beneficios de la psicoterapia facilitada por caballos.
Los caballos pueden ser un espejo emocional para los humanos. Responden al estado de ánimo que mostramos. Son animales de manada y de presa, lo que significa que tienen un fuerte sentido emocional y lo utilizan como herramienta de supervivencia, se alimentan de otros caballos de la manada y responden a ellos. Si un caballo de la manada se asusta, los demás se asustan. Responden de forma similar a los humanos. Si una persona se acerca a un caballo con ira, el caballo responderá rehuyendo o volviéndose obstinado. Los caballos nunca ocultan sus emociones.
Los caballos también pueden abrir la puerta a revivir acontecimientos traumáticos del pasado. Un cliente que ha sufrido abusos infantiles o domésticos puede romper a llorar al ver a los caballos asustados. Puede que le recuerde experiencias de impotencia o desamparo, de estar asustado y no tener a nadie a quien recurrir. Cualquiera de estos tipos de reacciones es material rico para la terapia de conversación y puede trabajarse inmediatamente o incluso en futuras sesiones.
Los caballos son animales majestuosos con los que es maravilloso estar. Los caballos son gentiles y honestos, además, no tienen la capacidad de manipular o mentir.
La terapia asistida por caballos, en particular la psicoterapia facilitada por caballos, puede tener resultados positivos para quienes se están recuperando de la drogadicción, el trauma, la depresión o una serie de otros problemas psicológicos. Puede ayudar a las personas a desarrollar una ética de trabajo, identificar y procesar los sentimientos y aprender a confiar. Sin embargo, para que sea segura y eficaz, la psicoterapia facilitada por caballos debe ser proporcionada por un profesional médico autorizado.